Valentino Rossi quiere sacar jugo al momento dulce que está viviendo en la última semana. Y hoy en Mugello aprovechó para rodar con las últimas evoluciones de Ducati, sobre todo la que se refiere al motor y algunas configuraciones de chasis en lo que será el primer test que en Borgo Panigale tienen previstos en esta pista de la Toscana.
Tras alcanzar el podio en Le Mans, en Ducati no han perdido tiempo y se han puesto a trabajar sobre el terreno para aplicar todo el desarrollo intenso que vienen haciendo en la fábrica. Ayer, el primer día de ensayos, que correspondía a Troy Bayliss y Franco Battaini se tuvo que cancelar por la lluvia y esta mañana también amaneció con agua en la pista.
Tanto Hayden como Valentino tuvieron que esperar al mediodía para comenzar con sus tandas. El día se cerró a las 6.15 de la tarde, con más retraso de lo habitual en un test, bajo la atenta mirada del Team Mánager de Ducati, Vittoriano Guareschi y el ingeniero jefe de proyecto, Filippo Preziosi.
Rossi terminó la jornada con 55 vueltas por 52 del estadounidense, pero no hubo toma de tiempos. El trabajo continuará mañana si las condiciones climatológicas son favorables.
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